Servicios De Crisis
¿Qué es una crisis? Una situación de crisis se puede aplicar a muchas cosas diferentes: un desastre natural, una toma de rehenes, un accidente que requiere ir a una sala de emergencias, un joven fugitivo, un divorcio, o incluso obtener algo que no pediste en un restaurante. A veces, lo que una persona considera una crisis no puede ser una crisis para otra persona. En el mundo de SASS (Monitoreo, Asesoramiento y Apoyo), trabajamos con niños que experimentan una emergencia psiquiátrica y que tienen determinados tipos de cobertura de seguro. Una emergencia psiquiátrica es cuando un joven está en peligro de hacerse daño a sí mismo, a otras personas, o en peligro de ver un decremento significativo en el funcionamiento diario que puede representar un peligro para ellos mismo u otras personas. SASS trabaja específicamente con los jóvenes que tienen Medicaid o están bajo la tutela del Estado (DCFS) hasta los 21 años y no asegurados hasta los 18 años.
Ofrecemos estos servicios en un montón de lugares diferentes, incluyendo las salas de emergencia, escuelas, hogares y el centro de detención para nombrar unos pocos. Durante una evaluación, los trabajadores de crisis evalúan el nivel de gravedad con el fin de decidir si la persona puede estar seguro en la comunidad. A partir de ahí el trabajador de crisis va a trabajar en conjunto con el adolescente y la familia para buscarles recursos en la comunidad que les puedan servir. Tratamos de mantener a los jóvenes estables en su hogar y comunidad, si es posible. Si se considera que es seguro hacerlo, vamos a trabajar con la familia para ofrecer opciones de servicios en el área y tratar de vincularlos con el servicio que prefieran. Si se decide que un joven es incapaz de permanecer a salvo en la comunidad, algunos de los servicios más restrictivos incluyen un PHP (programa de hospitalización parcial), donde los jóvenes reciben tratamiento de salud mental en un programa de hospital de día, o la hospitalización del paciente. Las evaluaciones miran cómo un joven está funcionando el momento de la evaluación. Algunos de las cosas que se discuten durante el asesoramiento incluyen el problema principal, historia de salud mental, y que servicios y apoyos existen. Esta información puede ser obtenida de varias fuentes, incluyendo los jóvenes, sus representantes y profesionales de la escuela, los médicos de atención primaria y personal de urgencias. La decisión sobre qué es lo mejor para el niño se hace a través de la colaboración con los padres, otros proveedores de salud mental y médicos.
Después de que un cliente recibe una evaluación, independientemente del resultado, reciben servicios de seguimiento para ayudar a continuar el proceso de estabilización para reducir la probabilidad de que el cliente vaya a necesitar otra evaluación de crisis. Estos servicios incluyen terapia, manejo de casos y servicios de apoyo comunitario. Si se necesitan más servicios a largo plazo, el equipo de SASS trabajara para ayudar a vincular a la familia con servicios apropiados.
A pesar de la naturaleza de las crisis, los trabajadores responden con calma, profesionalidad y eficiencia a la crisis 24 horas al día, 7 días a la semana para ayudar a mantener y estabilizar los jóvenes de nuestra comunidad con necesidades de salud mental.